Un joven jardinero persa dice a su príncipe:
—¡Sálvame! Encontré a la muerte esta mañana. Me hizo un gesto de amenaza. Esta noche quisiera estar en Ispahan.
El bondadoso príncipe le presta sus caballos. Por la tarde, el príncipe encuentra a la Muerte y le pregunta:
—Esta mañana, ¿por qué hiciste a nuestro jardinero un gesto de amenaza?
—No fue un gesto de amenaza — le responde — sino un gesto de sorpresa. Pues lo veía lejos de Ispaham esta mañana y debo tomarlo esta noche en Ispahan.
Actividad
1. Cuenta esta misma historia cambiando el narrador. Haz que el narrador sea la muerte o el príncipe, o el joven jardinero si es que ha sobrevivido:Yo un joven jardinero persa le dije a mi príncipe:
-¡Sálvame! He encontrado la Muerte esta mañana. Me hizo un gesto amenaza. Esta noche quisiera estar en Ispahan.
El bondadoso príncipe me prestó sus caballos. Por la tarde el príncipe encuentra a la Muerte y le pregunta:
-Esta mañana, ¿por qué hicistes a nuestro jardinero un gesto de amenaza?
-No fué un gesto de amenaza.-le responde.-Sino un gesto de sorpresa. Pues lo veía lejos de Ispahan esta mañana y debo tomarlo esta noche en Ispahan.
2. Anota algunos de los cambios que has tenido que hacer al cambiar de narrador.
Yo, le dije, he encontrado, me prestó.